Los inversores solares son uno de los equipos más comunes en las instalaciones solares. Estos pequeños y potentes dispositivos convierten la corriente continua (CC) de la instalación fotovoltaica en corriente alterna (CA), que puede ser utilizada por los demás aparatos eléctricos de su edificio o vivienda.
Si está pensando en instalar un nuevo sistema solar, es posible que se pregunte qué tipo de inversor es el adecuado para usted y su propiedad. No todos los inversores son iguales. En función de sus necesidades y presupuesto, los distintos tipos ofrecen diferentes ventajas y ahorros de costes. Conocer los pros y los contras de cada opción le ayudará a tomar decisiones de compra con conocimiento de causa para obtener el máximo rendimiento de su inversión. Aquí respondemos a algunas preguntas habituales sobre la compra de inversores conectados a la red y le explicamos en qué debe fijarse cuando busque un proveedor de inversores.
¿Cuál es la diferencia entre un inversor conectado a la red y un inversor de batería?
Los inversores conectados a la red reciben electricidad de la red eléctrica y la convierten en corriente continua utilizable por el sistema fotovoltaico. A continuación, esta energía se añade a los paneles FV y se envía al usuario final a través de un sistema de cableado que puede incluir subestación, inversor y paneles. Los inversores de batería toman su nombre del hecho de que convierten la energía de la batería en electricidad de CC utilizable por el sistema fotovoltaico. Son los más adecuados para aplicaciones que tienen acceso a un banco de baterías, como instalaciones domésticas aisladas de la red y embarcaciones.